«RECTIFICAR ES DE SABIOS» Y «UNA RETIRADA A TIEMPO ES UNA VICTORIA» !!!!

Hay dos dichos o refranes a los que nunca encontré tanto sentido como este sábado cántabro: «rectificar es de sabios» y «una retirada a tiempo es una victoria». Aunque la historia de este último día de agosto es más bien la primera porque realmente no me retiré. Explico:
Como ya se sabe y doy a entender, no corro o al menos no lo suelo hacer por España, simplemente porque en este momento de mi vida prefiero conocer mundo más allá de mi patria. Pero por otro lado, y tras las 6 horas de Roma el 13 de julio, sentía que debía quitarme la espinita con la ultradistancia haciendo algo para compensar lo que pudo ser y no fue en la capital italiana. Por ello, ir a Santander a disputar una de sus pruebas sería mi siguiente ultra (3h, 6h, 12h, 24h, 50k o 100k). Me decanté sin pensarlo demasiado en los 100k, supongo que por algún impulso hacia esa bonita cifra, pero no tuve en cuenta todo lo que me queda este año por hacer.

Por motivos laborales y sobretodo por comodidad llego el viernes desde Madrid en avión directamente al aeropuerto de Santander (mi vuelo más corto hasta la fecha, 32 minutos en el aire). Allí me espera Saioa, parte absolutamente fundamental en este evento. Nos vamos directamente al hotel a descansar para bailar en el Parque de las LLamas a la mañana siguiente.

El día S ha llegado. Según vamos hacia el parque, veo un cartel informativo de la climatología que puedo jurar que pensaba que estaba estropeado: 21ºC 100% de humedad.
<La semana del evento había tenido una tendida conversación con Maite, quien me asesora desde hace un año todo el tema de la suplementación en carrera y fuera de ella. Había cosas que cambiar respecto a Roma, y así se hizo, pero cuando las condiciones son las que son, poco se puede hacer. Ese cambio fue absolutamente perfecto.>

Con esta humedad, iba a ser imposible acabar la carrera en óptimas condiciones, al menos sin consecuencias, por lo que ya iba a empezar con miedo.
Tras unos buenos momentos previos al pistoletazo saludando a buenos y buenísimos amigos, y habiendo preparado nuestra mesa personal con nuestros avituallamientos, al lado del de Marc, sólo queda ir hasta la zona de nuestra salida, que es distinta a la de las otras pruebas, sólo a unos cientos de metros (al ser circular sólo era cruzar un puente).

Salimos a la hora exacta más o menos. El circuito es «sencillo», 54 vueltas iguales de 1840 metros más una de 1500 (aprox.). El recorrido no es más veloz del mundo, ya que alguna que otra curva más cerrada ta hace frenar y acelerar para mantener el ritmo; eso sí, super plano. Mi ritmo es constante, parando todos y absolutamente todos los parciales en 4’/km. Ritmo demasiado vivo, pero que no consigo bajar. Voy cómodo y quiero seguir así. Sé perfectamente que «petar» es cuestión de tiempo. La humedad se mantiene en el 98%, pero sinceramente pienso: qué más da ?!

Llevo manando sudor desde el minuto 2, una constante sudoración que hacen que recuerde minuto tras minuto la estrategia de hidratación y suplementación. La llevo al dedillo, y sin duda alguna, exactamente eso hace que no decaiga mi ritmo. <recuerdo cómo en Roma, en el primer kilómetro supe lo que iba a pasar>. Las vueltas van pasando y mis parciales siguen siendo calcados, parando con muescas en los 5000 en 19:57, 10000 en 39:58 y media maratón en 1:25:00. Todo va perfecto. Saioa, que se había marchado a hacer su entrenamiento, llega y me proviene de todo lo que necesito. Un lujo tenerla al lado.

En cuanto a la clasificación hasta el momento, no había cambiado lo mínimo y seguía como desde la primera vuelta en 8ª posición, pero un 100k no empieza hasta el kilómetro 80, así que sin darle demasiada importancia seguí a mi ritmo. Seguí a mi ritmo hasta que la primera frase de esta crónica me vino a la mente. «RECTIFICAR ES DE SABIOS» Y «UNA RETIRADA A TIEMPO ES UNA VICTORIA» !!!!
Llevaba unos meses que por trabajo me muevo por el horno de España; primero Córdoba y luego Ciudad Real. Mis entrenamientos, sin excepción, son a menos del 20% de humedad (entre 32 y 38 grados), y como era de esperar, esto iba a pasar factura.

En el kp30 mi cuerpo me habla y como uno ya tiene experiencia en esto, le escucho. A día de hoy, pienso que una de las mejores decisiones en carrera que he tenido en mi vida. Pregunté a los jueces en qué momento podía salirme de los 100k teniendo una distancia homologada y me dijeron que a los 50. No había más que pensar: 30 kilómetros alegres, y 20 kilómetros de rodaje; todo esto con un dorsal en el pectoral y rodeado de locos como yo, y gente que ama este deporte.
Sinceramente, pensaba en todo lo que viene en esta segunda parte del año, en que 7 días después correría el siguiente maratón, en que soy liebre en dos Majors este año, que también soy liebre en otro maratón importantísimo en EEUU en octubre, en Valencia, corro Atenas, Florencia….y así hasta el total de 11 maratones hasta nochevieja, sumado a otras tres carreras más cortas. Todo es cuestión de priorizar y darle más o menos importancia. Santander era un «salvaguarda» de Roma pero era el momento; sin más.

4:09:01 es mi tiempo oficial, que ni mucho menos se acerca a las 3:19:09 conseguidos en el Campeonato Sueco de 100k en Växjö en 2021 cuando fui liebre personal de Iván Penalba, pero ahora estamos a otras cosas.

Felicito gratamente a la familia Soto que con pasión y amor por este deporte, organiza a la perfección este evento. Agradezco de corazón a Maite y LevelUpSuplementación , a Absotec como patrocinador principal (en búsqueda activa), y en especial a Saioa por el gran trabajo de logística tanto física como moral que ha desempeñado en este sábado 31 de agosto de 2024.

Próximo evento: maratón de Helsigborg (Suecia) el 7 de septiembre como pacer 3h.

SALUD & KMS